¿El maestro enseña o educa?
Un profesor con más de veinte años de experiencia, ha estado
contándome pequeñas anécdotas, historias y momentos en el aula en toda su
trayectoria. Tras disfrutar con su experiencia, quiero reflexionar con todos
vosotros sobre la enseñanza de hoy en día.
La educación que nosotros hemos vivido hasta el momento, el
profesor era la figura de autoridad, el pilar principal de la enseñanza, el
encargado de transmitir los conocimientos a los discentes. El sistema educativo
contaba con un sistema de armonía, en el que los padres solo intervenían cuando
sus propios hijos desmejoraban en su proceso de enseñanza y aprendizaje, en
momento de ayuda, u otros. Pero, ¿y ahora? ¿qué ocurre?.
Actualmente, podemos observar en nuestro día a días más
cercano, que la realidad educativa ha desmejorado. Nos encontramos ante una
situación en la que parece ser que los propios padres someten la autoridad a
los propios docentes, en la que los niños no tienen respeto por nada, y en la
que el balbuceo general en contra de los docentes se remite a que no saben
enseñar, ni educar. Ahora bien, ante esto último, nos planteamos, ¿es el
docente el que tiene que educar o enseñar?, o ¿son los padres los que asumen un
papel permisivo en sus hijos y no saben educar?.
Con esto, abro este tema para que nosotros como futuros
docentes y docentes que tengan la oportunidad de leer estos blogs, comentemos y
expresemos nuestras opiniones, ya que, este es nuestro mundo y depende de todos
nosotros, y si entre todos nos cooperamos, será un mundo mejor.
Hola queridísima Esther, me encanta tu aportación, pero metiendome en el tema veo totalmente normal ese cambio de disciplina con los profesores puesto que las sociedades van cambiando a lo largo del tiempo. Pienso que es totalmente necesario contextualizar las viñetas que has puesto ya que antiguamente veniamos de un dictadura donde el ejemplo de poder y obedencia era un requisito fundamental y ahora estamos en un época totalmente diferente donde predomina la libertad de todos. Y para acabar quiero poner un pregunta en el aire, ¿creeis que las nuevas leyes de protección a los niños han influido en este cambio de actuar en la escuela?
ResponderEliminarGrupo 12, Sergio Córtes
Una cosa es que los tiempos cambien y nos tengamos que adaptar a ellos, por supuesto. Está claro que para nada volvería atrás en cuanto a la libertad de expresión que existe ahora y en cuanto a un sistema ahora obsoleto que existía hace años, con la Dictadura.
ResponderEliminarPero lo que no se puede negar es que hemos perdido poder, como docentes, ante los padres. Personalmente es uno de los temas que más miedo me da, porque parece que ahora se le da más valor a la palabra del niño que a la autoridad del maestro. Estoy totalmente de acuerdo en que somos parte de la educación de los niños, que no solo educan los padres sino también lo hacemos nosotros, ya que a través de la escuela transmitimos una serie de valores que consideramos positivos para los niños.
El problema viene cuando padres y profesores no van en la misma dirección. Cuando desde la escuela se trabaja diariamente, no solo para transmitir conocimientos, sino también para inculcar ciertos valores, pero este trabajo es echado por tierra desde casa. Ahí es cuando realmente viene el problema.
El año pasado pude asistir a una reunión del tutor de un aula de 4º con los padres de los niños y me quedó una sensación muy amarga. Parecía que los padres y madres veían al profesor como el enemigo, cuando realmente todos trabajan en beneficio de los niños.
Creo que muchos padres no aceptan que sus hijos puedan llegar a tener un comportamiento negativo en la escuela y ese es el verdadero problema. Nos falta una asignatura en la carrera que nos enseñe cómo afrontar las reuniones con padres, cómo tratar con ellos sin que parezcamos que somos el enemigo al cual hay que machacar. Y no es broma.
Laura Gallardo Olivares. Grupo 10.
Como maestros tenemos una responsabilidad tremenda, pero no podemos ni debemos hacer de padres. Esto es tarea de los progenitores. Por otro lado, los colegios se han transformado en guarderías, donde los padres “descargan” a sus hijos, y les da igual que aprendan o no, mientras nos los quedemos la mayor cantidad de tiempo posible. No quiero volver a la época del capón en clase, pero tampoco quiero que el político de turno ponga mi profesión a la altura del betún. Gracias y un saludo.
ResponderEliminarJosé Juan Lozano Fulleda. Grupo 1.
Bajo mi punto de vista la respuesta es clara. Los padres deben ser los que eduquen a sus hijos en casa, y los docentes deberíamos poder limitarnos a transmitirles conocimientos y valores. Imaginándomelo de otra manera, me resulta totalmente imposible. Pongamos por ejemplo una clase con 30 alumnos, que cuenta con una niña extranjera que acaba de llegar de Polonia y no entiende nada de español, un hiperactivo y un niño con retraso madurativo (y creo que mi ejemplo no se sale de lo común), y ahora suponed que además de transmitir conocimientos, tenemos que educar a los niños. Imposible. Por muy formado, preparado y experimentado que esté el docente, me resulta imposible.
ResponderEliminarY cuando hablo de que sean los padres los que tienen que educar, me refiero, por supuesto, a transmitirles a sus hijos las normas de convivencia necesarias para relacionarse de manera adecuada en una sociedad, y no hablo en ningún momento de la transmisión de conocimientos o valores, que aunque se den en casa, la escuela es el principal ente de transmisión y los profesores jugamos un papel importantísimo.
Gracias por tu aportación. Un saludo.
Patricia Fernández de Córdoba